sábado, 5 de marzo de 2016

Mazmorra y Sueño

Ya llegado aquí hay que seguir. La seguridad de las antorchas poseo. Sé que mis probabilidades son pocas. Nulas. ¿Qué hago aquí? Sigo, ya no hay marcha atrás. O tal vez sí...Voy a avanzar.
 Aprendí a usar la daga. Estoy listo para matar. Criaturas horrendas.
¡Fría oscuridad!...me traes recuerdos. ¿Por qué ahora? No los necesito. Debo estar concentrado. Silencio.
¡Ahí estás! ¡Oh rey! Bendigo tu época y agradezco tu fortuna que ahora será mía. No me pongas trampas. Ya estás muerto y ese oro no se fue contigo. Deja hacer a los vivos.
 Necesito eso... ¿Dónde está? ¡Ah! El sueño...el sueño atrapante, como una doncella que rie jugando y corre para que vaya detrás de ella. Quieres persuadirme ¡Oh sueño! ¿Qué clase de maleficio sellaste aquí codicioso rey?
 El dibujo..lo conozco...el sueño...el sueño es hermoso.
¿Y la daga a quién ha de matar? ¿A mí? ¿Me he de unir a ese montón de huesos roídos? Infame...
¡Luz!...un ojo...¡soy yo!...yo...alguien...¿Quién?
Un pedazo de sol. Sí, te reconozco. Si tú me diste vida. Y aun aquí me vienes a buscar. Quisiera poder llorar para conocer mi conmoción. Pero me duermo...que sueño...mi mano tiesa...adios daga hermosa...mi niña.
¿Cómo llevas al sol? ¿A dónde vamos? Que grotesco. Que terrible...Ogro...
¡Estás helado radiante sol! ¡Ogro! ¡¿Quién eres?! ¡¿Por qué llevas al sol a cuestas?!

No hay comentarios:

Publicar un comentario